Es importante conocer las responsabilidades de cada uno de los trabajadores del edificio para saber a quién acudir en cada situación en particular. Una de las posiciones que más personas desconocen es la del mayordomo.
Puede que se deba a que su figura no se menciona en la ley sobre Copropiedad; sin embargo, cumple con una labor muy importante. En este post te ayudaremos a conocer cuáles son las funciones de un mayordomo de condominio. ¡No te lo pierdas!
Lo primero es entender el concepto general sobre este importante trabajador del condominio. En palabras simples, el mayordomo es la mano derecha del administrador del edificio. Se encarga de supervisar directamente todo lo que corresponde al administrador, para que el mismo solo deba acudir en momentos puntuales al edificio.
Para verlo de forma más detallada, pasaremos a mencionar cada una de las tareas del mayordomo del condominio:
Una de las responsabilidades más importantes del mayordomo es velar por el cumplimiento de las tareas de cada uno de los trabajadores del condominio. La supervisión de conserjes, personal de limpieza, vigilantes y otros empleados son parte de su labor diaria.
Algunos mecanismos en el edificio necesitan supervisión constante (incluso diaria, en algunos casos) para su correcto funcionamiento. Detectar una falla en una bomba de agua a tiempo, por ejemplo, puede marcar una gran diferencia y evitar muchos problemas. En muchos casos, el mayordomo se encarga de esta tarea y en otros vigila porque el encargado de la revisión cumpla con su compromiso.
El mayordomo, junto al Comité de Administración, queda como representante del condominio ante la ausencia del administrador. En los casos en los que los instaladores o mantenedores de ascensores u otra áreas acudan al edificio, el mayordomo se encarga de recibirlos y acompañarlos durante su gestión.
Cuando algún residente plantea un problema o una duda y el conserje y otro trabajador no puede resolverlo directamente, interviene el mayordomo. Este trabajador suele ser el más conocedor de los espacios, reglamentos y leyes vigentes. Así que puede responder ante estas situaciones sin necesidad de comunicación con el administrador.
Muchas personas confunden al mayordomo con un conserje. La razón es simple, el mayordomo puede compartir algunas tareas con el conserje. Asimismo, la mayoría de los mayordomos comenzaron como conserjes y escalaron una posición debido a su gran experiencia. En este sentido, tienen un gran conocimiento del área.
Gracias a este perfil en particular, los mayordomos son muy apreciados por los administradores, quienes la mayoría de las veces son especialistas en otras áreas, como la legal o la contaduría. Contar con una persona que ha dedicado gran parte de su vida a trabajar en condominios, es sin duda una gran ventaja para cualquier administrador.
Te recomendamos revisar también cuáles son los deberes de un conserje de edificios.
Como ya te comentamos, los mayordomos suelen ser conserjes de mucha experiencia. Al momento de contratar un profesional para este cargo, es importante fijarse en el recorrido que tenga en la conserjería; pero también se deben contemplar otras características.
El mayordomo, por ejemplo, debe tener capacidad de liderazgo para manejar al resto del personal. Asimismo, la capacidad de diálogo, la responsabilidad y el compromiso con el condominio, son muy importantes. De cualquier forma, la búsqueda del mayordomo casi siempre recae sobre el administrador.
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